«¿Qué cómo lo descubrí? Recibí una llamada de una alumna que teníamos matriculada en oposiciones. Me llamó desde Badajoz. Me dijo que no entendía como ella había ido a clases y su hermano, pagando 1.000 euros y sin ir a clases tenía tres títulos: Vigilante de seguridad, escolta y explosivos. Le dije que no se moviera y me fui inmediatamente desde Cáceres a verla, me entreviste con su hermano. La madre pagó los títulos a unos estafadores que habían ido por el pueblo, que está en la zona de la Serena. Es algo increíble». José Antonio Martín, gerente de Cenproex, cuenta a HOY cómo dio con la pista de una banda de estafadores que vendían tres títulos de seguridad privada.
El gerente de Cenproex investigó, recogió más información en la zona de la Serena, y luego fue a la Policía Judicial en donde presentó la denuncia y entregó el informe. Eso ocurrió a principios de marzo.
La Policía Nacional hizo su trabajo y detuvo en Extremadura y en Madrid a nueve personas, de entre 31 a 59 años de edad. Todos son españoles y algunos tienen relación con academias de seguridad privada. Uno de ellos es un empleado de Cenproex que es acusado de haber sacado del centro tres títulos, uno de cada especialidad, que son los que han sido escaneados para luego poner en ellos los nombres de los que daban los 1.000 euros.
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