La crisis actual está disparando el número de fraudes que los clientes tratan de endosar a las compañías de seguros. El número de partes falsos ha crecido un 10% en la provincia según los datos del Colegio de Mediadores del Seguro de Málaga. Las pólizas de automóviles son las más afectadas ya que el 78% de los intentos de engaños se han registrado en este sector.
Es más, el número total de casos en la provincia está aumentando progresivamente y ya se cifra en 2.600 cada año. Además, esta práctica no sale gratis a las aseguradoras ya que el impacto económico que suponen los fraudes al año se cifran, a escala nacional, en 650 millones de euros de perdidas.El primer puesto del ranking de las estafas lo ocupa el sector del automóvil y seguido de él, aparecen los engaños en diversos y seguridad civil, que suponen el 14,5% de los timos.
Por su parte, el número de fraudes en el ámbito de accidentes y salud supone el 1,9% según el organismo. La situación económica agudiza la picaresca de los clientes que organizan los dramas más insólitos y surrealistas entre familiares o amigos para estafar al seguro y así cobrar ese pequeño plus de dinero que no viene nada mal en los tiempos que corren. Desde tirar coches por barrancos hasta estrellarlos contra la pared. Por su parte las compañías aseguradoras también han exprimido su ingenio desde el florecimiento de este tipo de prácticas. Los contratos son cada vez más restrictivos y tratan de cerrar el círculo de los posibles timos lo máximo posible.
Por ejemplo, recurren cada vez más a los servicios de los detectives privados. Pero los verdaderos artífices a la hora de destapar los posibles timos de los clientes son los peritos que trabajan para las aseguradoras. "Los clientes nos dicen que les acusamos de ser ladrones, pero nosotros sólo planteamos pruebas", afirma Jordi Pérez, coordinador de peritos de Andalucía oriental de Zúrich Seguros. Ellos tratan de cazar a los timadores y se valen de diferentes tácticas como las llamadas cruzadas. "Llamamos a uno de los dos implicados en el siniestro y en vez de preguntar por él, lo hacemos por el otro", afirma Jesús Cerezuela, también perito de seguro. A través de esta técnica se descubren pactos entre amigos o familiares para conseguir el dinero del seguro."Los clientes se lo toman como robar en un supermercado, ¿quién no lo ha hecho alguna vez?", Cerezuela. Los timos a las pólizas de seguros de automóviles son bastante comunes sobre todo en estafas a pequeña escala. "Intentan timar a las compañías en cosas pequeñas y a veces cuesta más trabajo organizar toda la parafernalia que montan para el engaño que el dinero que se puedan llevar", sostiene este perito.
Algunas de las artimañas más usadas por los estafadores son la invención de choques con coches fantasma, los siniestros "accidentales" marcha atrás, el mágico cambio de sitio de los ocupantes del coche o la directa simulación de robos. Pero éstas no son las únicas vías para estafar al seguro. Los peritos que trabajan para las compañías coinciden en que la táctica más usada por los clientes es la de aprovecharse tras sufrir un siniestro real. Los asegurados exageran los daños para costear los arreglos de sus coches: "Se dan un golpe y se creen que les ha tocado la lotería", sostiene Pérez. Otros clientes directamente denuncian el robo de piezas que acaban de comprar: "Un cliente cambió las cuatro ruedas del coche por otras más modernas y luego denunció su robo para cobrar del seguro lo que le habían costado", señala el coordinador de Zúrich.En muchas ocasiones la jugada no sale redonda a los timadores. Hay casos en los que la picaresca de los conductores no es la suficiente como para engañar a las aseguradoras: "En algunos casos es evidente, no sólo para un perito sino para cualquier persona, que la posibilidad de un siniestro es imposible", relata Cerezuela: "Nos traen casos de dos vehículos que se estrellan y uno de ellos, por ejemplo, no tiene ni un rasguño mientras el otro tiene el parachoques destrozado".
Otras veces la meditada organización de los timos no sirve para nada ya que la casualidad juega malas pasadas como relatan desde la Mutua General de Seguros: "Un cliente sufrió un siniestro con su coche e intentó cobrar la indemnización de tres aseguradoras a la vez, pero dos de las empresas trabajaban con el mismo perito y lo pillaron"Pero en este abanico de posibilidades, otras veces es el cliente el que se descubre a sí mismo cómo explica Cerezuela: "Un hombre denunció la desaparición de su coche y comprobamos que una grúa había ido a su domicilio tan sólo dos días antes a desplazarlo de lugar".
Enlace: http://www.malagahoy.es/article/malaga/468639/las/companias/seguro/automoviles/alertan/la/oleada/intentos/fraude.html